La Confesión Bautista de Fe (1689): El Decreto de Dios (I)
Dios, desde toda la eternidad, por el sapientísimo y santísimo consejo de Su voluntad, ha decretado en Sí mismo, libre e inalterablemente, todas las cosas, todo lo que llega a suceder.
Dios, desde toda la eternidad, por el sapientísimo y santísimo consejo de Su voluntad, ha decretado en Sí mismo, libre e inalterablemente, todas las cosas, todo lo que llega a suceder.
Si tuvieras que examinar todos los títulos del género de “autoayuda”, probablemente podrías comenzar a ver cómo la “sabiduría” del mundo se ha compartido de cultura en cultura, de idioma en idioma, de época en época, y ha convergido en este género como un desastre pegajoso de una mezcolanza.
El sol está llegando a su máximo solar, la gente está preocupada por un “apocalipsis de Internet”, y desde la pandemia estamos presenciando nuevamente una histeria masiva. ¿En qué o en quién depositamos nuestra confianza?
En este Ser divino e infinito hay tres subsistencias, el Padre, el Verbo o Hijo y el Espíritu Santo, de una misma sustancia, un mismo poder y una misma eternidad, teniendo cada uno toda la esencia divina, pero la esencia indivisible.
Dios, teniendo en Sí mismo y de Sí mismo toda vida, gloria, bondad y bienaventuranza, es el único todosuficiente, en Sí mismo y para Sí mismo, no teniendo necesidad de ninguna de las criaturas que ha hecho, ni derivando ninguna gloria de ellas, sino manifestando solamente Su propia gloria en ellas, por medio de ellas, hacia ellas y sobre ellas.
Dios es absolutísimo, que obra todas las cosas conforme al consejo de Su inmutable y justísima voluntad, para Su propia gloria.
¿Cómo puede haber un Dios cuando hay tanta injusticia en el mundo? ¿Dónde está la justicia que anhelamos? ¿Qué tiene que decir Dios sobre todo esto? Joseph (Joe) Owen responde a nuestras preguntas.
¿Cómo entendemos el matrimonio a la luz del relato de la creación en Génesis? ¿Cómo contrasta con lo que vemos en el mundo? ¿Cual es el fundamento para el significado del matrimonio?
El Señor nuestro Dios es el único Dios vivo y verdadero; cuya subsistencia está en Él mismo y es de Él mismo, infinito en ser y perfección, cuya esencia no puede ser comprendida por nadie sino solo por Él mismo.