Todos somos apologetas
Desde el comienzo del cristianismo, los cristianos hemos sido llamados a presentar una apología de nuestra fe a cualquier persona que nos pregunte por qué creemos lo que creemos.
Desde el comienzo del cristianismo, los cristianos hemos sido llamados a presentar una apología de nuestra fe a cualquier persona que nos pregunte por qué creemos lo que creemos.
Si el corazón del hombre no es rectificado y si el pecado continúa dominándolo, el hombre no podrá evitar el abuso y la tergiversación de la creación de Dios y de todos los productos culturales que surgen de su interacción con ella.
Como cristianos latinoamericanos, ¿cómo podemos pensar sobre este hombre, esta prominente figura en la historia de nuestro continente?
No debe sorprendernos de que los defensores del aborto saquen provecho de la epidemia del Zika. De hecho, existe un precedente histórico de usar las epidemias para conseguir derechos reproductivos.
La creciente aceptación pública del pluralismo religioso merece ser confrontada, debido a su efecto en la cultura Occidental y Latinoamericana.
Dios creó al hombre con la creatividad y la capacidad para inventar y participar en deportes. Es un producto cultural, y dado que la cultura es la religión del pueblo, el deporte también puede ser una forma de adoración.